Family Man
EL BIEN Y EL MAL
1. AMORES QUE DUELEN: ALBA
https://www.telecinco.es/amoresqueduelen/a-carta/amores_que_duelen_2_2324205011.html
EL BIEN Y EL MAL
1. AMORES QUE DUELEN: ALBA
https://www.telecinco.es/amoresqueduelen/a-carta/amores_que_duelen_2_2324205011.html
Es el seguimiento evangélico de Cristo. Es seguir a Cristo de una manera radical según el Evangelio, en pobreza, castidad y obediencia, en comunidad de vida fraterna y apostólica.
Todo cristiano por el hecho de serlo esta llamado a vivir imitando a Cristo, pero el religioso lo vive con radicalidad, no de una manera afectiva solamente, como se pide a todo seguidor de Cristo, sino de una manera efectiva.
La vida religiosa es y se define como: SEGUIR A CRISTO, y seguirle en estos aspectos:
a) SIENDO ANTE TODO LLAMADOS POR EL = VOCACION
Recordando que la iniciativa es suya, no hay mérito propio por lo que todo supone gratuidad infinita, absoluta, que depende directamente de su voluntad. Así lo afirma:
Mc 3,13 » subió al monte y llamó a los que el quiso para que estuvieran con El»
Jn 15,16 » No me habéis elegido vosotros a mi, sino soy yo quien os ha elegido a vosotros».
El llamado de Dios es para todos los hombres, y es un llamado a la salvación, a la santidad. Este es un llamado universal, pero el llamado a la vida religiosa es un llamado personal.
Un llamado que resuena en el corazón del hombre y
que demanda de este una respuesta.
La vocación por naturaleza es un DON antes de ser una exigencia a vivir. Es gratuidad de amor infinito de parte de Dios que nos llama a vivir solo para El. Amor definitivo e irrevocable. Rom 11,29 : » los dones y la vocación de Dios son irrevocables». Don personal que implica vivirlo en comunidad, que es la convocación de aquellos que han recibido la misma gracia.
En Dios llamar es DAR. Es decir que crea en nosotros la capacidad de responder a su llamada. La vocación es principio de otros dones, es un don dinámico, es decir que crece que es activo nunca rutinario, que exige crecimiento en la fidelidad. La vocación se consciente se crece en ella y se acoge con fe diariamente.
NO SOMOS NOSOTROS OPTANDO POR CRISTO,
ES EL OPTANDO POR NOSOTROS
Para Poder responder hay que recordar que Jesús es fiel y que nunca se arrepiente de sus dones, ni siquiera cundo le somos infieles. 2 Tm 2,13 » si somos infieles Dios permanece fiel, no puede negarse a sí mismo.
b) SEGUIR A CRISTO ES VIVIR CON EL , VIVIENDO AL MISMO TIEMPO CON OTROS SEGUIDORES SUYOS = COMUNION
Convivir = comunión. Lo más nuclear de seguir a Cristo es la vida comunitaria. Seguir a Cristo ES VIVIR CON CRISTO, esto es ya vida comunitaria, Mc 3, 14 » Para que estuvieran con El».
Comunidad es común unidad de cada uno y de todos con Cristo y en Cristo. Cristo es bien común de todos y de cada uno. Cristo nunca separa siempre une. El llamado a seguirle como lo muestra Mt 9,9 es llamado a seguirle a El personalmente, no a los otros discípulos, pero al responderle entramos a vivir con aquellos que también han sido llamados y que se convierten en nuestros hermanos. Y así se define que:
VIVIR EN AMISTAD CON CRISTO
ES VIVIR EN AMISTAD CON ELLOS
c) SEGUIRLE ES COMPARTIR SU MISION
MC 3,14 » y los llamó para que estuvieran con el y para enviarlos a predicar».
Compartir con Cristo su vida es compartir su misión, que consiste adelantar aquí y ahora el modo de vivir propio del Reino de los Cielos, anunciarlo y traerlo. Es decir PROCLAMAR EL AMOR DE DIOS A LOS HOMBRES.
EL RELIGIOSO EVANGELIZA NO SOLO CON SU HACER,
SINO CON SU SER = CON SER CONSAGRADO
d) SEGUIR A CRISTO ES VIVIR COMO EL = POBRE, VIRGEN Y OBEDIENTE
Cristo vivió pobre, virgen y obediente, de igual manera debemos de adoptar sus actitudes interiores. Dejarse invadir por su Espíritu, asimilar su manera de pensar su escala de valores, identificarse con sus mismos sentimientos.
Cristo es el CONSAGRADO que vive esta consagración:
– En amor total e inmediato, divino y humano al Padre y a los hombres = VIRGINIDAD, renunciando a toda mediación a todo egoísmo.
– En actitud de total y gozosa docilidad a la voluntad del Padre, manifestada a través de múltiples mediaciones humanas ( autoridades) = OBEDIENCIA.
– En disponibilidad total de los que se es y de lo que se tiene para los demás = POBREZA, viviendo decididamente para los otros, dándolo todo y dándose todo sin reservas para nosotros. Como Cristo se da totalmente a Dios Padre y a los hombres el religioso igual.
e) SEGUIR A CRISTO ES SER PERPETUO DISCIPULO = DOCILIDAD
Esta es una actitud indispensable y permanente.
Implica: dejarse enseñar y querer aprender.
En la vida religiosa Cristo nos enseña a través de sus mediaciones humanas. Es necesario sentirnos siempre PERPETUOS DISCIPULOS y reconocer siempre nuestra necesidad de recibir formación y nunca maestros.
f) SEGUIRLE ES ESTAR DISPUESTOS A TODO POR EL = DISPONIBILIDAD TOTAL
La mejor definición de FE y AMOR = DISPONIBILIDAD TOTAL.
Esta debe ser un ejercicio constante y permanente, una actitud interior y exterior.
Implica estar dispuestos a perderlo todo por El , » todo lo considero basura con tal de ganar a Cristo» dirá el apóstol. (Flp 3,8)
g) SEGUIRLE ES FIARSE DE EL SIN OTRA GARANTIA QUE EL MISMO = FE
Creer en El con FE total Jn 20,29 » dichosos los que no han visto y han creído «; 1Ped 1,8-9 » A quien amáis sin haberle visto; en quien creéis aunque de momento no le veis «. Apoyarse exclusivamente en El , fiarse de él sin posible vacilación. Creer en su amor, en su poder cuando todo parezca irremediablemente perdido.
LA VIDA RELIGIOSA ES UN ACTO PERMENENTE
DE FE TOTAL EN JESUS
g) SEGUIRLE ES RENUNCIAR A TODA SEGURIDAD FUERA DE EL = CONFIANZA
Cristo debe ser nuestra suprema y única seguridad. Renunciar a todo lo que nos lleve a buscar toda seguridad o todo provecho propio, para emplearlo todo en favor de los demás.
h) SEGUIRLE IMPLICA UNA DECISION PERSONAL QUE COMPROMETE TODA LA VIDA
La llamada de Dios nos hace responsables nos hace capaces de responder y nos exige una respuesta. Una respuesta comprometida, que parte de la libertad y del amor.
Respondiendo basados en la FIDELIDAD DE DIOS.
J) SEGUIRLE ES IMITARLE
Configurarnos con Cristo poco a poco, en sus tres dimensiones (VOTOS). Asimilarse a Él hasta el punto de ser otra humanidad suya.
ES DECIR CRISTIFICARNOS
Es el seguimiento evangélico de Cristo. Es seguir a Cristo de una manera radical según el Evangelio, en pobreza, castidad y obediencia, en comunidad de vida fraterna y apostólica.
Todo cristiano por el hecho de serlo esta llamado a vivir imitando a Cristo, pero el religioso lo vive con radicalidad, no de una manera afectiva solamente, como se pide a todo seguidor de Cristo, sino de una manera efectiva.
La vida religiosa es y se define como: SEGUIR A CRISTO, y seguirle en estos aspectos:
a) SIENDO ANTE TODO LLAMADOS POR EL = VOCACION
Recordando que la iniciativa es suya, no hay mérito propio por lo que todo supone gratuidad infinita, absoluta, que depende directamente de su voluntad. Así lo afirma:
Mc 3,13 » subió al monte y llamó a los que el quiso para que estuvieran con El»
Jn 15,16 » No me habéis elegido vosotros a mi, sino soy yo quien os ha elegido a vosotros».
El llamado de Dios es para todos los hombres, y es un llamado a la salvación, a la santidad. Este es un llamado universal, pero el llamado a la vida religiosa es un llamado personal.
Un llamado que resuena en el corazón del hombre y
que demanda de este una respuesta.
La vocación por naturaleza es un DON antes de ser una exigencia a vivir. Es gratuidad de amor infinito de parte de Dios que nos llama a vivir solo para El. Amor definitivo e irrevocable. Rom 11,29 : » los dones y la vocación de Dios son irrevocables». Don personal que implica vivirlo en comunidad, que es la convocación de aquellos que han recibido la misma gracia.
En Dios llamar es DAR. Es decir que crea en nosotros la capacidad de responder a su llamada. La vocación es principio de otros dones, es un don dinámico, es decir que crece que es activo nunca rutinario, que exige crecimiento en la fidelidad. La vocación se consciente se crece en ella y se acoge con fe diariamente.
NO SOMOS NOSOTROS OPTANDO POR CRISTO,
ES EL OPTANDO POR NOSOTROS
Para Poder responder hay que recordar que Jesús es fiel y que nunca se arrepiente de sus dones, ni siquiera cundo le somos infieles. 2 Tm 2,13 » si somos infieles Dios permanece fiel, no puede negarse a sí mismo.
b) SEGUIR A CRISTO ES VIVIR CON EL , VIVIENDO AL MISMO TIEMPO CON OTROS SEGUIDORES SUYOS = COMUNION
Convivir = comunión. Lo más nuclear de seguir a Cristo es la vida comunitaria. Seguir a Cristo ES VIVIR CON CRISTO, esto es ya vida comunitaria, Mc 3, 14 » Para que estuvieran con El».
Comunidad es común unidad de cada uno y de todos con Cristo y en Cristo. Cristo es bien común de todos y de cada uno. Cristo nunca separa siempre une. El llamado a seguirle como lo muestra Mt 9,9 es llamado a seguirle a El personalmente, no a los otros discípulos, pero al responderle entramos a vivir con aquellos que también han sido llamados y que se convierten en nuestros hermanos. Y así se define que:
VIVIR EN AMISTAD CON CRISTO
ES VIVIR EN AMISTAD CON ELLOS
c) SEGUIRLE ES COMPARTIR SU MISION
MC 3,14 » y los llamó para que estuvieran con el y para enviarlos a predicar».
Compartir con Cristo su vida es compartir su misión, que consiste adelantar aquí y ahora el modo de vivir propio del Reino de los Cielos, anunciarlo y traerlo. Es decir PROCLAMAR EL AMOR DE DIOS A LOS HOMBRES.
EL RELIGIOSO EVANGELIZA NO SOLO CON SU HACER,
SINO CON SU SER = CON SER CONSAGRADO
d) SEGUIR A CRISTO ES VIVIR COMO EL = POBRE, VIRGEN Y OBEDIENTE
Cristo vivió pobre, virgen y obediente, de igual manera debemos de adoptar sus actitudes interiores. Dejarse invadir por su Espíritu, asimilar su manera de pensar su escala de valores, identificarse con sus mismos sentimientos.
Cristo es el CONSAGRADO que vive esta consagración:
– En amor total e inmediato, divino y humano al Padre y a los hombres = VIRGINIDAD, renunciando a toda mediación a todo egoísmo.
– En actitud de total y gozosa docilidad a la voluntad del Padre, manifestada a través de múltiples mediaciones humanas ( autoridades) = OBEDIENCIA.
– En disponibilidad total de los que se es y de lo que se tiene para los demás = POBREZA, viviendo decididamente para los otros, dándolo todo y dándose todo sin reservas para nosotros. Como Cristo se da totalmente a Dios Padre y a los hombres el religioso igual.
e) SEGUIR A CRISTO ES SER PERPETUO DISCIPULO = DOCILIDAD
Esta es una actitud indispensable y permanente.
Implica: dejarse enseñar y querer aprender.
En la vida religiosa Cristo nos enseña a través de sus mediaciones humanas. Es necesario sentirnos siempre PERPETUOS DISCIPULOS y reconocer siempre nuestra necesidad de recibir formación y nunca maestros.
f) SEGUIRLE ES ESTAR DISPUESTOS A TODO POR EL = DISPONIBILIDAD TOTAL
La mejor definición de FE y AMOR = DISPONIBILIDAD TOTAL.
Esta debe ser un ejercicio constante y permanente, una actitud interior y exterior.
Implica estar dispuestos a perderlo todo por El , » todo lo considero basura con tal de ganar a Cristo» dirá el apóstol. (Flp 3,8)
g) SEGUIRLE ES FIARSE DE EL SIN OTRA GARANTIA QUE EL MISMO = FE
Creer en El con FE total Jn 20,29 » dichosos los que no han visto y han creído «; 1Ped 1,8-9 » A quien amáis sin haberle visto; en quien creéis aunque de momento no le veis «. Apoyarse exclusivamente en El , fiarse de él sin posible vacilación. Creer en su amor, en su poder cuando todo parezca irremediablemente perdido.
LA VIDA RELIGIOSA ES UN ACTO PERMENENTE
DE FE TOTAL EN JESUS
g) SEGUIRLE ES RENUNCIAR A TODA SEGURIDAD FUERA DE EL = CONFIANZA
Cristo debe ser nuestra suprema y única seguridad. Renunciar a todo lo que nos lleve a buscar toda seguridad o todo provecho propio, para emplearlo todo en favor de los demás.
h) SEGUIRLE IMPLICA UNA DECISION PERSONAL QUE COMPROMETE TODA LA VIDA
La llamada de Dios nos hace responsables nos hace capaces de responder y nos exige una respuesta. Una respuesta comprometida, que parte de la libertad y del amor.
Respondiendo basados en la FIDELIDAD DE DIOS.
J) SEGUIRLE ES IMITARLE
Configurarnos con Cristo poco a poco, en sus tres dimensiones (VOTOS). Asimilarse a Él hasta el punto de ser otra humanidad suya.
ES DECIR CRISTIFICARNOS
No muchos conocen bien que, aunque el sacerdocio de Cristo es único, se manifiesta en tres ministerios sagrados distintos. “El ministerio eclesiástico, instituido por Dios, está ejercido en diversos órdenes que ya desde antiguo reciben los nombres de obispos, presbíteros y diáconos” (LG 28). La vida, la tradición y el magisterio de la Iglesia, ya desde los tiempos de San Ignacio de Antioquia /siglo I/, discípulo de San Pablo, establece estos tres grados. El Concilio Vaticano II al revisar todos los sacramentos ratifica esta organización jerárquica de la Iglesia “en la que no todos los miembros desempeñan la misma función “(Rom 12,4).
La liturgia de las ordenaciones manifiesta perfectamente esta realidad. Existe un ritual para la ordenación de los obispos, presbíteros y diáconos. La liturgia es expresión de la fe católica, la teología, la tradición y el magisterio de la Iglesia. En todos los casos el rito esencial de ordenación consiste en la imposición de las manos. Así, como el bautismo y la confirmación, el orden sacerdotal “imprime carácter”, es decir, concede el don del Espíritu Santo, que es marca o señal espiritual de una persona que ha sido consagrada de una vez para siempre. Para realizar dicho ministerio se unge con el “crisma”.
1.- El rito de Consagración de Obispos recuerda en qué consiste el ministerio de obispo cuando le exhorta con las palabras: “Recuerda…” que en la Iglesia a ti confiada has de ser “fiel dispensador, moderador y custodio de los sacramentos de Cristo”, gobernando a su familia como el Buen Pastor. La oración de consagración dice: “Infunde ahora sobre este elegido la fuerza que de ti procede: el espíritu de gobierno que diste a tu amado Hijo, y Él, a su vez, comunicó a los santos apóstoles…” “…ejercite ante ti el sumo sacerdocio”.
Entre los diversos ministerios que existen en la Iglesia, ocupa el primer lugar el ministerio de los obispos son que, a través de una sucesión que se remonta hasta el principio, “son los transmisores de la semilla apostólica” (LG 20). Son por tanto sucesores de los apóstoles. Tienen la plenitud del sacerdocio en el primer grado. Son dispensadores de la gracia en los sacramentos y sobre todo en la Eucaristía, en el cuidado pastoral y litúrgico de la Iglesia y maestros del pueblo para garantizar y defender la recta doctrina.
2.- En el rito de ordenación de los presbíteros se definen como colaboradores del obispo, participando del ministerio sacerdotal en segundo grado. Son ministros de la Palabra, administradores de los sacramentos y guías del Pueblo de Dios. Así reza el obispo en la ordenación del presbítero: “Te pedimos, Padre todopoderoso, que confieras a este siervo tuyo la dignidad del presbiterado; renueva en su corazón el Espíritu de santidad; reciba de ti el segundo grado del ministerio sacerdotal y sea, con su conducta, ejemplo de vida”
.
3.- El ministerio del Diaconado se ha actualizado de modo especial siguiendo el mandato del Concilio Vaticano II:”Restáurese el orden del diaconado”. Ya en los Hechos de los Apóstoles aparece la designación de siete diáconos para ayudar a los apóstoles en la caridad para administrar los bienes en el “servicio cotidiano”(Hch 6, 1), “con sobriedad y misericordia” (San Policarpo Ad Filipenses, V.2). Con la imposición de las manos por el obispo los diáconos se encuadran dentro del ministerio del orden (AG 16), se incorporan al estado clerical y se incardinan en una diócesis en obediencia al obispo.
El diaconado permanente puede ser conferido a hombres casados y constituye un enriquecimiento importante para la misión de la Iglesia. Se llama permanente porque siempre serán diáconos sin posibilidad de acceder al ministerio presbiteral y antes de acceder o ser ordenados diáconos pueden casarse. Pero han de vivir su matrimonio durante unos años antes de recibir el sacramento del orden como diáconos.
No muchos conocen bien que, aunque el sacerdocio de Cristo es único, se manifiesta en tres ministerios sagrados distintos. “El ministerio eclesiástico, instituido por Dios, está ejercido en diversos órdenes que ya desde antiguo reciben los nombres de obispos, presbíteros y diáconos” (LG 28). La vida, la tradición y el magisterio de la Iglesia, ya desde los tiempos de San Ignacio de Antioquia /siglo I/, discípulo de San Pablo, establece estos tres grados. El Concilio Vaticano II al revisar todos los sacramentos ratifica esta organización jerárquica de la Iglesia “en la que no todos los miembros desempeñan la misma función “(Rom 12,4).
La liturgia de las ordenaciones manifiesta perfectamente esta realidad. Existe un ritual para la ordenación de los obispos, presbíteros y diáconos. La liturgia es expresión de la fe católica, la teología, la tradición y el magisterio de la Iglesia. En todos los casos el rito esencial de ordenación consiste en la imposición de las manos. Así, como el bautismo y la confirmación, el orden sacerdotal “imprime carácter”, es decir, concede el don del Espíritu Santo, que es marca o señal espiritual de una persona que ha sido consagrada de una vez para siempre. Para realizar dicho ministerio se unge con el “crisma”.
1.- El rito de Consagración de Obispos recuerda en qué consiste el ministerio de obispo cuando le exhorta con las palabras: “Recuerda…” que en la Iglesia a ti confiada has de ser “fiel dispensador, moderador y custodio de los sacramentos de Cristo”, gobernando a su familia como el Buen Pastor. La oración de consagración dice: “Infunde ahora sobre este elegido la fuerza que de ti procede: el espíritu de gobierno que diste a tu amado Hijo, y Él, a su vez, comunicó a los santos apóstoles…” “…ejercite ante ti el sumo sacerdocio”.
Entre los diversos ministerios que existen en la Iglesia, ocupa el primer lugar el ministerio de los obispos son que, a través de una sucesión que se remonta hasta el principio, “son los transmisores de la semilla apostólica” (LG 20). Son por tanto sucesores de los apóstoles. Tienen la plenitud del sacerdocio en el primer grado. Son dispensadores de la gracia en los sacramentos y sobre todo en la Eucaristía, en el cuidado pastoral y litúrgico de la Iglesia y maestros del pueblo para garantizar y defender la recta doctrina.
2.- En el rito de ordenación de los presbíteros se definen como colaboradores del obispo, participando del ministerio sacerdotal en segundo grado. Son ministros de la Palabra, administradores de los sacramentos y guías del Pueblo de Dios. Así reza el obispo en la ordenación del presbítero: “Te pedimos, Padre todopoderoso, que confieras a este siervo tuyo la dignidad del presbiterado; renueva en su corazón el Espíritu de santidad; reciba de ti el segundo grado del ministerio sacerdotal y sea, con su conducta, ejemplo de vida”
.
3.- El ministerio del Diaconado se ha actualizado de modo especial siguiendo el mandato del Concilio Vaticano II:”Restáurese el orden del diaconado”. Ya en los Hechos de los Apóstoles aparece la designación de siete diáconos para ayudar a los apóstoles en la caridad para administrar los bienes en el “servicio cotidiano”(Hch 6, 1), “con sobriedad y misericordia” (San Policarpo Ad Filipenses, V.2). Con la imposición de las manos por el obispo los diáconos se encuadran dentro del ministerio del orden (AG 16), se incorporan al estado clerical y se incardinan en una diócesis en obediencia al obispo.
El diaconado permanente puede ser conferido a hombres casados y constituye un enriquecimiento importante para la misión de la Iglesia. Se llama permanente porque siempre serán diáconos sin posibilidad de acceder al ministerio presbiteral y antes de acceder o ser ordenados diáconos pueden casarse. Pero han de vivir su matrimonio durante unos años antes de recibir el sacramento del orden como diáconos.
Las Lecturas de hoy nos permiten pensar en las notas características de la Iglesia, que son cuatro: una, santa, católica y apostólica. Precisamente hace unos meses la Congregación para la Doctrina de la Fe publicó algunas respuestas a preguntas sobre la Doctrina de la Iglesia. En dichas respuestas se decía, por ejemplo, que la Iglesia de Jesucristo subsiste en la Iglesia católica, señalándose así la identidad entre ambas. Ello no significa que en otras comunidades cristianas no existan elementos de verdad o santificación, sino que incide en la unidad de la Iglesia como realidad espiritual y visible.
La Iglesia es una porque así la fundó Jesucristo, y porque se identifica con su cuerpo, que no puede ser muchos. Sin embargo esa unidad ha estado en peligro desde el principio. A ello se refiere el Apóstol al recriminar a los de Corinto que haya facciones entre ellos. Cristo, dice Pablo, no está dividido y tampoco pueden estarlo los cristianos. Jesucristo es el garante de la unidad porque es Él quien nos redime y nos convoca.
La capitalidad de Jesucristo hace que la Iglesia sea santa. A veces se dice de la Iglesia que es santa y pecadora. Pero radicalmente es santa, pues si no fuera así no podría santificar. Es decir, cuando se bautizara a alguien no sabríamos si lo redime o lo mancha con sus faltas. La Iglesia es santa, aunque formen parte de ella personas pecadoras. Benedicto XVI utilizó la imagen de la luna, que vista de cerca es rugosa, llena de cráteres pero que ilumina gracias a una luz que recibe de fuera, del sol. Como Jesucristo no se separa de su Iglesia esta no deja de ser santa.
Además la Iglesia es católica, es decir, universal. Desde el inicio del evangelio se ve ese designio de Dios de alcanzar a todos los pueblos. En el Evangelio de hoy también vemos como el Señor se dirige a predicar fuera de Israel, al territorio de Zabulón y Neptalí. A ello se refiere también la primera lectura. Consciente de su vocación universal, de que ha de llegar a todos los hombres y a todos los pueblos, la Iglesia es por su propia naturaleza misionera.
Finalmente la Iglesia es apostólica. Ello significa que Jesús eligió a unas personas a las que constituyó como columnas y comunicó el Espíritu Santo para que continuaran su misión en el mundo. La apostolicidad se ha mantenido gracias a la imposición de las manos en la consagración de los obispos. A ello se refería ya san Ireneo en el siglo II y es necesaria para que exista la Iglesia. Las comunidades protestantes, al haber perdido la sucesión apostólica, no son denominadas iglesias ni pueden celebrar los sacramentos, a excepción del bautismo. No sucede así con los ortodoxos, que han permanecido fieles a esa tradición. También hoy escuchamos como Jesús llama a sus primeros apóstoles y los une íntimamente a su misión al hacerlos “pescadores de hombres”. La apostolicidad, por tanto, no se refiere sólo a un modo de organizar la Iglesia, sino que comporta un participar de la misión de Jesús, para lo cuál Él comunica su poder a quienes han de representarlo y continuar su misión.
Pensar en las notas características de la Iglesia nos ayuda a amar esta gran institución que Jesús nos ha dado para nuestra salvación y a través de la cual podemos encontrarnos con Él.
Las Lecturas de hoy nos permiten pensar en las notas características de la Iglesia, que son cuatro: una, santa, católica y apostólica. Precisamente hace unos meses la Congregación para la Doctrina de la Fe publicó algunas respuestas a preguntas sobre la Doctrina de la Iglesia. En dichas respuestas se decía, por ejemplo, que la Iglesia de Jesucristo subsiste en la Iglesia católica, señalándose así la identidad entre ambas. Ello no significa que en otras comunidades cristianas no existan elementos de verdad o santificación, sino que incide en la unidad de la Iglesia como realidad espiritual y visible.
La Iglesia es una porque así la fundó Jesucristo, y porque se identifica con su cuerpo, que no puede ser muchos. Sin embargo esa unidad ha estado en peligro desde el principio. A ello se refiere el Apóstol al recriminar a los de Corinto que haya facciones entre ellos. Cristo, dice Pablo, no está dividido y tampoco pueden estarlo los cristianos. Jesucristo es el garante de la unidad porque es Él quien nos redime y nos convoca.
La capitalidad de Jesucristo hace que la Iglesia sea santa. A veces se dice de la Iglesia que es santa y pecadora. Pero radicalmente es santa, pues si no fuera así no podría santificar. Es decir, cuando se bautizara a alguien no sabríamos si lo redime o lo mancha con sus faltas. La Iglesia es santa, aunque formen parte de ella personas pecadoras. Benedicto XVI utilizó la imagen de la luna, que vista de cerca es rugosa, llena de cráteres pero que ilumina gracias a una luz que recibe de fuera, del sol. Como Jesucristo no se separa de su Iglesia esta no deja de ser santa.
Además la Iglesia es católica, es decir, universal. Desde el inicio del evangelio se ve ese designio de Dios de alcanzar a todos los pueblos. En el Evangelio de hoy también vemos como el Señor se dirige a predicar fuera de Israel, al territorio de Zabulón y Neptalí. A ello se refiere también la primera lectura. Consciente de su vocación universal, de que ha de llegar a todos los hombres y a todos los pueblos, la Iglesia es por su propia naturaleza misionera.
Finalmente la Iglesia es apostólica. Ello significa que Jesús eligió a unas personas a las que constituyó como columnas y comunicó el Espíritu Santo para que continuaran su misión en el mundo. La apostolicidad se ha mantenido gracias a la imposición de las manos en la consagración de los obispos. A ello se refería ya san Ireneo en el siglo II y es necesaria para que exista la Iglesia. Las comunidades protestantes, al haber perdido la sucesión apostólica, no son denominadas iglesias ni pueden celebrar los sacramentos, a excepción del bautismo. No sucede así con los ortodoxos, que han permanecido fieles a esa tradición. También hoy escuchamos como Jesús llama a sus primeros apóstoles y los une íntimamente a su misión al hacerlos “pescadores de hombres”. La apostolicidad, por tanto, no se refiere sólo a un modo de organizar la Iglesia, sino que comporta un participar de la misión de Jesús, para lo cuál Él comunica su poder a quienes han de representarlo y continuar su misión.
Pensar en las notas características de la Iglesia nos ayuda a amar esta gran institución que Jesús nos ha dado para nuestra salvación y a través de la cual podemos encontrarnos con Él.
¿Para qué existe la Iglesia?


- aquí hay un montón de gente con cara de aburridos escuchando una conferencia sobre Dios o algo así
- le deben tener miedo al tipo del micrófono porque se sientan lejos de él
- son todos muy mayores, (incluido el tipo del micrófono)
- todo el mundo se vuelve y me mira… qué corte!
- aquí la gente no se conoce de nada…
- nadie me dice nada, nadie da los buenos días y eso que es la primera vez que vengo
- qué canciones más raras


¿Para qué existe la Iglesia?


- aquí hay un montón de gente con cara de aburridos escuchando una conferencia sobre Dios o algo así
- le deben tener miedo al tipo del micrófono porque se sientan lejos de él
- son todos muy mayores, (incluido el tipo del micrófono)
- todo el mundo se vuelve y me mira… qué corte!
- aquí la gente no se conoce de nada…
- nadie me dice nada, nadie da los buenos días y eso que es la primera vez que vengo
- qué canciones más raras


¿
3º DE ESO
Qué es la Iglesia:
Se denomina Iglesia al conjunto de fieles unidos por la misma fe, y que celebran las mismas doctrinas religiosas. También, es el edificio que consagran a Dios y que le dedican culto.
Es de resaltar, que el término Iglesia, en un principio se usaba para referirse a la asamblea de ciudadanos para tratar de asuntos políticos.
Por otro lado, el término Iglesia se aplica a las diversas dimensiones en que se fraccionó el cristianismo: iglesia católica, iglesia ortodoxa, iglesia anglicana, iglesia griega, iglesia maronita, entre otras. En cuanto a su constitución e institución, todas las iglesias tomaron forma social ya que no hay sociedad que no pueda subsistir sin autoridad, y en cuanto a su institución representa un sistema de preceptos dogmáticos, ritos y creencias.
Vea también sobre Cristianismo.
Cristo, instituyo la iglesia como una verdadera sociedad, jerarquizada y monárquica, con carácter de estabilidad, destinada a congregar los fieles hasta el fin de los tiempos. Los teólogos desarrollan este argumento y decidieron que la Iglesia Católica o Iglesia Católica Romana es la única verdadera Iglesia de Cristo, porque conserva la unidad visible y el primado de autoridad que fue conferido a Pedro, jefe de los apóstoles, y a sus sucesores.
En sociología, la Iglesia se caracteriza por ser un grupo religioso organizado e institucionalizado. La iglesia, es una sociedad cuyos miembros representan de la misma manera el mundo sagrado y sus relaciones con el mundo profano.
3º DE ESO
3º DE ESO
Qué es la Iglesia:
Se denomina Iglesia al conjunto de fieles unidos por la misma fe, y que celebran las mismas doctrinas religiosas. También, es el edificio que consagran a Dios y que le dedican culto.
Es de resaltar, que el término Iglesia, en un principio se usaba para referirse a la asamblea de ciudadanos para tratar de asuntos políticos.
Por otro lado, el término Iglesia se aplica a las diversas dimensiones en que se fraccionó el cristianismo: iglesia católica, iglesia ortodoxa, iglesia anglicana, iglesia griega, iglesia maronita, entre otras. En cuanto a su constitución e institución, todas las iglesias tomaron forma social ya que no hay sociedad que no pueda subsistir sin autoridad, y en cuanto a su institución representa un sistema de preceptos dogmáticos, ritos y creencias.
Vea también sobre Cristianismo.
Cristo, instituyo la iglesia como una verdadera sociedad, jerarquizada y monárquica, con carácter de estabilidad, destinada a congregar los fieles hasta el fin de los tiempos. Los teólogos desarrollan este argumento y decidieron que la Iglesia Católica o Iglesia Católica Romana es la única verdadera Iglesia de Cristo, porque conserva la unidad visible y el primado de autoridad que fue conferido a Pedro, jefe de los apóstoles, y a sus sucesores.
En sociología, la Iglesia se caracteriza por ser un grupo religioso organizado e institucionalizado. La iglesia, es una sociedad cuyos miembros representan de la misma manera el mundo sagrado y sus relaciones con el mundo profano.
¿
3º DE ESO
Qué es la Iglesia:
Se denomina Iglesia al conjunto de fieles unidos por la misma fe, y que celebran las mismas doctrinas religiosas. También, es el edificio que consagran a Dios y que le dedican culto.
Es de resaltar, que el término Iglesia, en un principio se usaba para referirse a la asamblea de ciudadanos para tratar de asuntos políticos.
Por otro lado, el término Iglesia se aplica a las diversas dimensiones en que se fraccionó el cristianismo: iglesia católica, iglesia ortodoxa, iglesia anglicana, iglesia griega, iglesia maronita, entre otras. En cuanto a su constitución e institución, todas las iglesias tomaron forma social ya que no hay sociedad que no pueda subsistir sin autoridad, y en cuanto a su institución representa un sistema de preceptos dogmáticos, ritos y creencias.
Vea también sobre Cristianismo.
Cristo, instituyo la iglesia como una verdadera sociedad, jerarquizada y monárquica, con carácter de estabilidad, destinada a congregar los fieles hasta el fin de los tiempos. Los teólogos desarrollan este argumento y decidieron que la Iglesia Católica o Iglesia Católica Romana es la única verdadera Iglesia de Cristo, porque conserva la unidad visible y el primado de autoridad que fue conferido a Pedro, jefe de los apóstoles, y a sus sucesores.
En sociología, la Iglesia se caracteriza por ser un grupo religioso organizado e institucionalizado. La iglesia, es una sociedad cuyos miembros representan de la misma manera el mundo sagrado y sus relaciones con el mundo profano.
3º DE ESO
3º DE ESO
Qué es la Iglesia:
Se denomina Iglesia al conjunto de fieles unidos por la misma fe, y que celebran las mismas doctrinas religiosas. También, es el edificio que consagran a Dios y que le dedican culto.
Es de resaltar, que el término Iglesia, en un principio se usaba para referirse a la asamblea de ciudadanos para tratar de asuntos políticos.
Por otro lado, el término Iglesia se aplica a las diversas dimensiones en que se fraccionó el cristianismo: iglesia católica, iglesia ortodoxa, iglesia anglicana, iglesia griega, iglesia maronita, entre otras. En cuanto a su constitución e institución, todas las iglesias tomaron forma social ya que no hay sociedad que no pueda subsistir sin autoridad, y en cuanto a su institución representa un sistema de preceptos dogmáticos, ritos y creencias.
Vea también sobre Cristianismo.
Cristo, instituyo la iglesia como una verdadera sociedad, jerarquizada y monárquica, con carácter de estabilidad, destinada a congregar los fieles hasta el fin de los tiempos. Los teólogos desarrollan este argumento y decidieron que la Iglesia Católica o Iglesia Católica Romana es la única verdadera Iglesia de Cristo, porque conserva la unidad visible y el primado de autoridad que fue conferido a Pedro, jefe de los apóstoles, y a sus sucesores.
En sociología, la Iglesia se caracteriza por ser un grupo religioso organizado e institucionalizado. La iglesia, es una sociedad cuyos miembros representan de la misma manera el mundo sagrado y sus relaciones con el mundo profano.
3º DE ESO
Curiosidades sobre la Iglesia: cómo se elige al Papa.
¿Cómo se elige a un nuevo papa? Secretos revelados

Con casi nueve siglos de existencia, los cónclaves cardenalicios para elegir al nuevo líder de la Iglesia Católica mantienen una aureola de misterio. Pero algunas preguntas ya tienen respuesta.
Los 115 cardenales católicos se encerraron este martes en la célebre Capilla Sixtina de El Vaticano, iniciando un nuevo cónclave para elegir al Papa que reemplazará a Benedicto XVI. El pontífice número 265 renunció argumentando que no se sentía lo bastante fuerte, a sus 85 años, para desempeñar la responsabilidad de una institución que convoca a más de mil millones de seres humanos.
Como los cardenales tienen el deber de guardar silencio sobre lo que suceda durante el cónclave, y no pueden salir del Palacio Vaticano hasta que hayan elegido a un nuevo papa, esta tradición se ha revestido de misterio a a través de los siglos.
Entre las preguntas que muchos nos hacemos, las siguientes son algunas de las que han dejado de ser parte del misterio.
¿Desde cuándo se celebra el cónclave?
La primera asamblea cardenalicia tuvo lugar en el año 1118 en el monasterio de Santa María in Pallara, en el Palatino. En el primer milenio, eran el clero y el pueblo los que elegían al obispo de Roma. Entre los siglos IV y VIII, la identidad del pontífice tenía que ser confirmada por el emperador, mientras que en la Alta Edad Media eran los aristócratas romanos los que resolvían la elección.
¿Es el Cónclave una elección como cualquier otra?
Según la legislación de la Iglesia, el Cónclave debe considerarse no un mero lugar de reunión de los Cardenales con derecho a voto, sino más bien un ámbito de retiro sagrado en el que los Cardenales electores invocan al Espíritu Santo para proceder a la elección del Pontífice Romano.
¿Sólo puede ser elegido Sumo Pontífice un cardenal?
La legislación canónica no impone requisitos para ser elegido Papa: por lo tanto, se deben considerar requisitos los propios del derecho divino para ser Obispo, es decir, ser varón con pleno uso de razón. En la práctica, sin embargo, desde hace muchos siglos el elegido ha sido siempre Cardenal.
¿Los cardenales se quedan encerrados en la Capilla Sixtina hasta que sea electo el Papa?
No, los cardenales se hospedan en la Casa Santa Marta, a 700 metros de la Capilla Sixtina. Allí duermen y se les sirven las comidas, incluido el almuerzo durante un receso entre las 13:00 y las 15:00 horas. Sí permanecen encerrados durante las votaciones, que son cuatro diarias: dos en la mañana y dos en la tarde, hasta que elijan a un Papa.
¿En qué idioma hablan durante el cónclave?
El idioma predominante es el italiano. No obstante, algunas expresiones que forman parte del ritual de las votaciones se dicen en latín. Un ejemplo: “Testor Christum Dominum, qui me iudicaturus est, me eum eligere, quem secundum Deum iudico eligi debere”, lo que quiere decir: “Invoco como testigo a Cristo el Señor, quien me ha de juzgar, de que he dado mi voto a aquél que, de conformidad con Dios, juzgo que debe ser electo”.
¿Cómo se desplazan los cardenales entre la Capilla Sixtina y la Casa Santa Marta?
Como la distancia entre los dos puntos es de apenas 700 metros, los cardenales que así lo desean pueden cubrir el trayecto a pie. Pero hay vehículos al servicio del Vaticano disponibles para tales efectos.
¿El papa tiene que ser electo por unanimidad?
No. Basta con una mayoría de dos tercios de los cardenales electores.
¿Cómo están previstas las votaciones?
El primer día solo se vota por la tarde, y a partir de entonces, hay que hacerlo dos veces por la mañana y otras dos por la tarde. Si al tercer día no hay fumata blanca, se hace un descanso de un día para rezar y reflexionar. Entonces se celebran hasta tres series de siete escrutinios, con una pausa entre cada serie, hasta alcanzar el consenso necesario.
En caso de que no lo hubiera, Juan Pablo II dio validez a la mayoría absoluta. Benedicto XVI, sin embargo, desdijo a su predecesor en 2007 y estableció los dos tercios como mayoría necesaria en cualquier caso. Pero en previsión de un cónclave largo y dificultades para decidir, estableció que al concluir sin éxito esas series de siete escrutinios, se pasara a elegir solo entre los dos más votados previamente que, además, no pueden votar.
¿Quién propone a los candidatos para la sucesión?
No hay ningún candidato ni tampoco campaña electoral. Cada cardenal escribe en una papeleta el nombre de aquel que cree que debería salir elegido “según la voluntad de Dios”. Votación tras votación se va perfilando entonces el favorito.
¿Pueden exponer los cardenales lo que sucede dentro de la Capilla Sixtina utilizando sus teléfonos celulares o tabletas?
No. Durante el cónclave, los cardenales electores no tienen permitido telefonear, ni recibir correspondencia, ni leer el diario, ni ver la televisión. Aunque según el portavoz del vaticano, P. Federico Lombardi, sólo los funcionarios tienen que someterse a una requisa, los cardenales no. Además, los cardenales se comprometen a guardar silencio.
¿Y si algún cardenal no acatara el deber de guardar silencio?
Deberá ser castigado con la excomunión, la expulsión de la Iglesia Católica.
¿Pueden conversar los cardenales fuera de la Capilla Sixtina?
Sí. Durante los días del cónclave pueden conversar normalmente entre sí, pero fuera del Vaticano no pueden contar lo que escucharon, so pena de excomunión.
¿Es divulgado al público el número de votos recibido por cada cardenal propuesto?
No. Sólo los participantes en el cónclave pueden saberlo.
¿Cómo van vestidos los cardenales durante las votaciones?
Utilizan el llamado “hábito coral”, que incluye túnica roja, sobrepelliz blanca, mozeta o capa corta roja, cruz pectoral, y en la cabeza, solideo rojo o la birrreta cardenalicia.
¿Puede votar un cardenal si está enfermo y no puede trasladarse a la Capilla Sixtina?
Sí. En esos casos se designa a los “infirmari” (enfermeros en latín) cardenales que también son electores, para que recojan los votos de los cardenales indispuestos que no consigan llegar a la sede del cónclave.
¿Cuántas votaciones pueden efectuarse?
Pueden efectuarse durante el cónclave hasta 34 votaciones, el máximo permitido por las normas de la Iglesia.
¿Brota humo de la chimenea de la Capilla Sixtina al final de cada votación?
No. Las boletas de votación sólo se queman al final de cada período, o sea, después de la segunda votación de la mañana y de la tarde. Tradicionalmente se produce humo negro porque se queman las papeletas de las votaciones no decisivas con paja húmeda. Son las conocidas fumatas negras que suele ver el pueblo romano desde la plaza de San Pedro, hasta que la fumata blanca indica la elección de un nuevo pontífice.
¿Qué ocurre después que se elige a un nuevo papa?
Cuando uno de los purpurados recibe dos terceras partes de los votos, el decano de los cardenales le pregunta en voz alta: “¿Aceptas tu elección canónica para sumo pontífice?”. Si la respuesta es afirmativa, le sigue otra pregunta: “¿Cómo quieres ser llamado?”. El papa electo responde con el nombre que ha escogido, el cual se anota de inmediato en un documento oficial. Sólo después de esto se queman las boletas de votación junto con los eventuales apuntes de los cardenales, esta vez produciendo humo blanco.
¿Cuándo se presenta el nuevo papa en público?
Después que los cardenales le juran obediencia, se reza una oración de acción de gracias y el llamado “cardenal protodiácono” presenta al nuevo papa en la Plaza de San Pedro con la fórmula “Habemus papam”. El nuevo pontífice se presenta entonces ante la multitud e imparte su primera bendición Urbi et Orbi (“a la ciudad –de Roma– y al mundo”).
3º DE ESO
Curiosidades sobre la Iglesia: cómo se elige al Papa.
¿Cómo se elige a un nuevo papa? Secretos revelados

Con casi nueve siglos de existencia, los cónclaves cardenalicios para elegir al nuevo líder de la Iglesia Católica mantienen una aureola de misterio. Pero algunas preguntas ya tienen respuesta.
Los 115 cardenales católicos se encerraron este martes en la célebre Capilla Sixtina de El Vaticano, iniciando un nuevo cónclave para elegir al Papa que reemplazará a Benedicto XVI. El pontífice número 265 renunció argumentando que no se sentía lo bastante fuerte, a sus 85 años, para desempeñar la responsabilidad de una institución que convoca a más de mil millones de seres humanos.
Como los cardenales tienen el deber de guardar silencio sobre lo que suceda durante el cónclave, y no pueden salir del Palacio Vaticano hasta que hayan elegido a un nuevo papa, esta tradición se ha revestido de misterio a a través de los siglos.
Entre las preguntas que muchos nos hacemos, las siguientes son algunas de las que han dejado de ser parte del misterio.
¿Desde cuándo se celebra el cónclave?
La primera asamblea cardenalicia tuvo lugar en el año 1118 en el monasterio de Santa María in Pallara, en el Palatino. En el primer milenio, eran el clero y el pueblo los que elegían al obispo de Roma. Entre los siglos IV y VIII, la identidad del pontífice tenía que ser confirmada por el emperador, mientras que en la Alta Edad Media eran los aristócratas romanos los que resolvían la elección.
¿Es el Cónclave una elección como cualquier otra?
Según la legislación de la Iglesia, el Cónclave debe considerarse no un mero lugar de reunión de los Cardenales con derecho a voto, sino más bien un ámbito de retiro sagrado en el que los Cardenales electores invocan al Espíritu Santo para proceder a la elección del Pontífice Romano.
¿Sólo puede ser elegido Sumo Pontífice un cardenal?
La legislación canónica no impone requisitos para ser elegido Papa: por lo tanto, se deben considerar requisitos los propios del derecho divino para ser Obispo, es decir, ser varón con pleno uso de razón. En la práctica, sin embargo, desde hace muchos siglos el elegido ha sido siempre Cardenal.
¿Los cardenales se quedan encerrados en la Capilla Sixtina hasta que sea electo el Papa?
No, los cardenales se hospedan en la Casa Santa Marta, a 700 metros de la Capilla Sixtina. Allí duermen y se les sirven las comidas, incluido el almuerzo durante un receso entre las 13:00 y las 15:00 horas. Sí permanecen encerrados durante las votaciones, que son cuatro diarias: dos en la mañana y dos en la tarde, hasta que elijan a un Papa.
¿En qué idioma hablan durante el cónclave?
El idioma predominante es el italiano. No obstante, algunas expresiones que forman parte del ritual de las votaciones se dicen en latín. Un ejemplo: “Testor Christum Dominum, qui me iudicaturus est, me eum eligere, quem secundum Deum iudico eligi debere”, lo que quiere decir: “Invoco como testigo a Cristo el Señor, quien me ha de juzgar, de que he dado mi voto a aquél que, de conformidad con Dios, juzgo que debe ser electo”.
¿Cómo se desplazan los cardenales entre la Capilla Sixtina y la Casa Santa Marta?
Como la distancia entre los dos puntos es de apenas 700 metros, los cardenales que así lo desean pueden cubrir el trayecto a pie. Pero hay vehículos al servicio del Vaticano disponibles para tales efectos.
¿El papa tiene que ser electo por unanimidad?
No. Basta con una mayoría de dos tercios de los cardenales electores.
¿Cómo están previstas las votaciones?
El primer día solo se vota por la tarde, y a partir de entonces, hay que hacerlo dos veces por la mañana y otras dos por la tarde. Si al tercer día no hay fumata blanca, se hace un descanso de un día para rezar y reflexionar. Entonces se celebran hasta tres series de siete escrutinios, con una pausa entre cada serie, hasta alcanzar el consenso necesario.
En caso de que no lo hubiera, Juan Pablo II dio validez a la mayoría absoluta. Benedicto XVI, sin embargo, desdijo a su predecesor en 2007 y estableció los dos tercios como mayoría necesaria en cualquier caso. Pero en previsión de un cónclave largo y dificultades para decidir, estableció que al concluir sin éxito esas series de siete escrutinios, se pasara a elegir solo entre los dos más votados previamente que, además, no pueden votar.
¿Quién propone a los candidatos para la sucesión?
No hay ningún candidato ni tampoco campaña electoral. Cada cardenal escribe en una papeleta el nombre de aquel que cree que debería salir elegido “según la voluntad de Dios”. Votación tras votación se va perfilando entonces el favorito.
¿Pueden exponer los cardenales lo que sucede dentro de la Capilla Sixtina utilizando sus teléfonos celulares o tabletas?
No. Durante el cónclave, los cardenales electores no tienen permitido telefonear, ni recibir correspondencia, ni leer el diario, ni ver la televisión. Aunque según el portavoz del vaticano, P. Federico Lombardi, sólo los funcionarios tienen que someterse a una requisa, los cardenales no. Además, los cardenales se comprometen a guardar silencio.
¿Y si algún cardenal no acatara el deber de guardar silencio?
Deberá ser castigado con la excomunión, la expulsión de la Iglesia Católica.
¿Pueden conversar los cardenales fuera de la Capilla Sixtina?
Sí. Durante los días del cónclave pueden conversar normalmente entre sí, pero fuera del Vaticano no pueden contar lo que escucharon, so pena de excomunión.
¿Es divulgado al público el número de votos recibido por cada cardenal propuesto?
No. Sólo los participantes en el cónclave pueden saberlo.
¿Cómo van vestidos los cardenales durante las votaciones?
Utilizan el llamado “hábito coral”, que incluye túnica roja, sobrepelliz blanca, mozeta o capa corta roja, cruz pectoral, y en la cabeza, solideo rojo o la birrreta cardenalicia.
¿Puede votar un cardenal si está enfermo y no puede trasladarse a la Capilla Sixtina?
Sí. En esos casos se designa a los “infirmari” (enfermeros en latín) cardenales que también son electores, para que recojan los votos de los cardenales indispuestos que no consigan llegar a la sede del cónclave.
¿Cuántas votaciones pueden efectuarse?
Pueden efectuarse durante el cónclave hasta 34 votaciones, el máximo permitido por las normas de la Iglesia.
¿Brota humo de la chimenea de la Capilla Sixtina al final de cada votación?
No. Las boletas de votación sólo se queman al final de cada período, o sea, después de la segunda votación de la mañana y de la tarde. Tradicionalmente se produce humo negro porque se queman las papeletas de las votaciones no decisivas con paja húmeda. Son las conocidas fumatas negras que suele ver el pueblo romano desde la plaza de San Pedro, hasta que la fumata blanca indica la elección de un nuevo pontífice.
¿Qué ocurre después que se elige a un nuevo papa?
Cuando uno de los purpurados recibe dos terceras partes de los votos, el decano de los cardenales le pregunta en voz alta: “¿Aceptas tu elección canónica para sumo pontífice?”. Si la respuesta es afirmativa, le sigue otra pregunta: “¿Cómo quieres ser llamado?”. El papa electo responde con el nombre que ha escogido, el cual se anota de inmediato en un documento oficial. Sólo después de esto se queman las boletas de votación junto con los eventuales apuntes de los cardenales, esta vez produciendo humo blanco.
¿Cuándo se presenta el nuevo papa en público?
Después que los cardenales le juran obediencia, se reza una oración de acción de gracias y el llamado “cardenal protodiácono” presenta al nuevo papa en la Plaza de San Pedro con la fórmula “Habemus papam”. El nuevo pontífice se presenta entonces ante la multitud e imparte su primera bendición Urbi et Orbi (“a la ciudad –de Roma– y al mundo”).
LA ORGANIZACIÓN JERÁRQUICA DE LA IGLESIA
La Iglesia católica tiene una organización jerárquica, pero no se trata de un ejercicio de la autoridad al uso, como el que se puede dar en cualquier empresa o institución. La misión esencial de cualquier católico, desde el último bautizado hasta el propio Papa, es siempre la misma, el anuncio del Evangelio y el ejercicio de la caridad.
Pese a ello, dentro de la Iglesia hay una diversidad de ministerios, cuyas responsabilidades y tareas están reguladas por el Código de Derecho Canónico en el libro que se refiere al «Pueblo de Dios», en concreto, la sección II sobre «La constitución jerárquica de la Iglesia».
1. El Papa. Elegido por los cardenales electores durante el cónclave, el Papa representa a Cristo en la Tierra, por eso se le denomina el Vicario de Cristo. En el Santo Padre permanece la función que el Señor encomendó singularmente a Pedro, primero entre los apóstoles. Además es la cabeza del colegio de obispos, que le prestan su cooperación de distintas maneras, al igual que los cardenales.
2. Los cardenales. Son «creados» por el Papa. Los que tienen menos de 80 años de edad pueden votar al nuevo Pontífice en caso de que se celebre el Cónclave. Asisten al Santo Padre tanto colegialmente, cuando son convocados para tratar juntos cuestiones de más importancia, como personalmente, mediante los distintos oficios que desempeñan, ayudando al Pontífice sobre todo en su gobierno cotidiano de la Iglesia universal. Para poder ser nombrado cardenal basta con ser sacerdote, aunque el candidato deberá recibir la ordenación episcopal antes de recibir el anillo y la birreta de manos del Santo Padre.
3. Los obispos. Ejercen una triple misión: enseñar, santificar y gobernar una porción de la Iglesia con un criterio propio, como cada uno de los sucesores de los Apóstoles. Ningún obispo, aunque haya sido nombrado cardenal, tiene autoridad sobre otro, sino que cada uno depende directamente del Papa.
En sus respectivas diócesis, son responsables de atender a sus presbíteros; cuidar de que cumplan debidamente las obligaciones propias de su estado, y de que dispongan de aquellos medios e instituciones que necesitan para el incremento de su vida espiritual e intelectual.
Ayudados por los presbíteros, sus colaboradores, y por los diáconos, los obispos tienen la misión de enseñar auténticamente la fe, de celebrar el culto, sobre todo la Eucaristía, y de dirigir su Iglesia como verdaderos pastores.
Para poder ser nombrado obispo se requiere que el interesado sea: linsigne por la firmeza de su fe, tenga buenas costumbres, buena fama y cuente con al menos treinta y cinco años. También tiene que llevar al menos cinco años de presbítero y ser doctor o al menos licenciado en Sagrada Escritura, teología o derecho canónico, o al menos verdaderamente experto en esas disciplinas.
4. Los párrocos. Es el pastor propio de la parroquia que se le confía, y ejerce el cuidado pastoral de la comunidad que le está encomendada bajo la autoridad del obispo diocesano. Entre sus tareas está la de conocer a los fieles que se le encomiendan. Para ello, visita las familias, a los enfermos, especialmente a los moribundos, fortaleciéndoles con la administración de los sacramentos. También está pendiente de los pobres y de aquellos que sufren especiales dificultades.
5. Los fieles laicos. Son los encargados de descubrir o de idear los medios para impregnar de vida cristianas las realidades sociales, políticas y económicas. Están llamados a ser testigos de Cristo en todas las cosas, también en el interior de la sociedad.
GRADOS DEL SACERDOCIO
No muchos saben que aunque el sacerdocio de Cristo es uno solo, existen en la Iglesia 3 grados dentro de este ministerio ¿Sabes cuáles son?
Uno de los grados de orden, es el de los diáconos. Seguramente los has visto pero quizás, no los has reconocido.
Son hombres que van al seminario y antes de ordenarse sacerdotes se ordenan diáconos de forma transitoria. Estos pueden bautizar, predicar y repartir la comunión, pero no pueden celebrar la misa, consagrar, ni confesar.
Hay también unos varones solteros o casados que son ordenados diáconos para quedarse así y ayudar a los sacerdotes: son los diáconos permanentes.
En otro orden, están los presbíteros, que pueden convertir el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo, pueden presidir misa y pueden perdonar los pecados. Todos los sacerdotes hacen promesas (no votos), o sea, que prometen: el celibato (esto significa que renuncian al matrimonio y a tener hijos). Además se comprometen a imitar las virtudes que vivió Cristo de oración, pobreza y obediencia.
Finalmente se encuentran los obispos. El Papa es quien los escoge y les encarga una zona o territorio específico de la Iglesia, una diócesis. El obispo vela por varios sacerdotes que a su vez cuidan de sus parroquias. Varias parroquias hacen una diócesis. Los obispos hacen las mismas cosas que cualquier sacerdote común y corriente y, además, son los que administran el Sacramento de la Confirmación y los únicos que pueden ordenar otros sacerdotes. Algo muy importante es saber que un obispo debe ser siempre fiel al Papa.
Oremos por nuestros diáconos, presbíteros y obispos para que puedan ofrecer con generosidad, fidelidad y entrega su servicio a la Iglesia.
Ahondando un poco…
Por la imposición de las manos, el cristiano puede ser llamado a servir en la Iglesia en tres grados u órdenes distintos: como obispo, como presbítero o como diácono. Los dos primeros participan del sacerdocio de Cristo cabeza mientras que el tercero está destinado a transparentar a Cristo siervo.
El episcopado
Los Apóstoles comunicaron a sus colaboradores el Don del Espíritu Santo para presidir las comunidades cristianas que nacían por la predicación de la palabra en todo el imperio romano. Así vemos cómo San Pablo mismo ordena a Timoteo y Tito: “al partir yo para Macedonia te rogué que permanecieras en Éfeso para que mandaras a algunos que no enseñaran doctrinas extrañas” (1 Tim. 1,3). “El motivo de haberte dejado en Creta, fue para que acabaras de organizar lo que faltaba y establecieras presbíteros en cada ciudad como yo te ordené” (Tit. 1,5).
Al saludar a los filipenses en su carta, menciona cómo desde los tiempos apostólicos, existen estos tres grados perfectamente establecidos: “Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, con los epíscopos y diáconos, gracia y paz de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo” (Fil. 1, 1).
El Concilio Vaticano II en su documento Lumen Gentium (la luz de las naciones) nos dice: “Entre los diversos ministerios que existen en la Iglesia, ocupa el primer lugar el ministerio de los obispos que, a través de una sucesión que se remonta al principio, son los transmisores de la semilla apostólica” (LG 20). Los obispos gozan “de la plenitud del Sacramento del Orden”. Es la cumbre del ministerio sagrado. El obispo está destinado para santificar, enseñar y gobernar a los fieles.
Por la Consagración Episcopal, el obispo queda constituido como miembro del colegio episcopal en comunión jerárquica con el Papa y con los demás obispos. Esta colegialidad del episcopado queda manifestado en el hecho de que para consagrar a un obispo normalmente se requiere la participación de varios obispos y la intervención especial del Papa, de quien recibe el nombramiento directamente.
El presbiterado
Ya desde el inicio, como hemos visto, los obispos se vieron en la necesidad de ayuda en diversos niveles y ordenaron presbíteros y diáconos. Los primeros están unidos al orden episcopal y participan de la autoridad y poderes con los cuales Cristo construye, santifica y gobierna a su Iglesia. Aunque no tienen la plenitud del sacerdocio, están unidos al obispo y quedan consagrados como verdaderos sacerdotes de la Nueva Alianza, a imagen de Cristo, Sumo y Eterno Sacerdote.
Ya sea en una parroquia, capellanía, movimiento apostólico, misiones, etc. el sacerdote es ordenado para “anunciar el Evangelio a los fieles, dirigirlos y para celebrar el culto divino”.
Las oraciones de la ordenación sacerdotal expresan bellisimamente el papel del futuro presbítero:
“De igual manera que diste a los Apóstoles de tu Hijo colaboradores subordinados, llenos de fe y sabiduría, para que los ayudases a predicar el Evangelio por todo el mundo, te pedimos Señor, que nos concedas también a nosotros esta misma ayuda que necesita tanto nuestra fragilidad”.
Por su parte, el Prefacio de la Misa, entre otros conceptos ora del siguiente modo:
“Porque Cristo no sólo comunica la dignidad del sacerdocio a todo el pueblo redimido, sino que con especial predilección y mediante la imposición de las manos, elige a algunos de entre los hermanos y los hace partícipes de su ministerio de salvación, a fin de que renueven, en su nombre, el sacrificio redentor, preparen a tus hijos el banquete pascual, fomenten la caridad en tu pueblo santo, lo alimenten con la palabra, lo fortifiquen con los Sacramentos y consagrando su vida a Ti y a la salvación de sus hermanos, se esfuercen por reproducir en sí la imagen de Cristo y te den un constante testimonio de fidelidad y amor”.
El diaconado
Leemos en los Hechos de los Apóstoles cómo al crecer la comunidad cristiana, los Apóstoles se vieron incapaces de atender adecuadamente sobre todo a las viudas y entonces “convocaron a la asamblea de los discípulos y dijeron: No parece bien que nosotros abandonemos la palabra de Dios para servir las mesas. Por lo tanto, hermanos, buscad entre vosotros a siete hombres de buena fama, llenos del Espíritu y de sabiduría y los pondremos al frente de este cargo… y habiendo hecho oración, les impusieron las manos” (Hech. 6, 2-6), constituyéndolos “diáconos” o sea, servidores.
El obispo les impone las manos significando así que el diácono está especialmente vinculado al obispo en las tareas de la diaconía. Les corresponde, entre otras cosas, asistir al obispo en la celebración de los sagrados misterios, sobre todo en la Eucaristía y en la distribución de la misma. Pueden asistir al matrimonio y bendecirlo, proclamar el Evangelio y predicar, presidir exequias, bautizar, etc.
Desde el Concilio Vaticano II la Iglesia ha restablecido el diaconado como ministerio permanente, entre varones solteros o casados, lo que viene a ser una grandísima ayuda a los presbíteros, que como los apóstoles, están normalmente abrumados de trabajo.
El diaconado, el presbiterado y el episcopado son grados sacramentales del Orden. No son tres sacramentos distintos, sino que los tres constituyen un único sacramento, el del Orden sacerdotal.
3º DE ESO
LA ORGANIZACIÓN JERÁRQUICA DE LA IGLESIA
La Iglesia católica tiene una organización jerárquica, pero no se trata de un ejercicio de la autoridad al uso, como el que se puede dar en cualquier empresa o institución. La misión esencial de cualquier católico, desde el último bautizado hasta el propio Papa, es siempre la misma, el anuncio del Evangelio y el ejercicio de la caridad.
Pese a ello, dentro de la Iglesia hay una diversidad de ministerios, cuyas responsabilidades y tareas están reguladas por el Código de Derecho Canónico en el libro que se refiere al «Pueblo de Dios», en concreto, la sección II sobre «La constitución jerárquica de la Iglesia».
1. El Papa. Elegido por los cardenales electores durante el cónclave, el Papa representa a Cristo en la Tierra, por eso se le denomina el Vicario de Cristo. En el Santo Padre permanece la función que el Señor encomendó singularmente a Pedro, primero entre los apóstoles. Además es la cabeza del colegio de obispos, que le prestan su cooperación de distintas maneras, al igual que los cardenales.
2. Los cardenales. Son «creados» por el Papa. Los que tienen menos de 80 años de edad pueden votar al nuevo Pontífice en caso de que se celebre el Cónclave. Asisten al Santo Padre tanto colegialmente, cuando son convocados para tratar juntos cuestiones de más importancia, como personalmente, mediante los distintos oficios que desempeñan, ayudando al Pontífice sobre todo en su gobierno cotidiano de la Iglesia universal. Para poder ser nombrado cardenal basta con ser sacerdote, aunque el candidato deberá recibir la ordenación episcopal antes de recibir el anillo y la birreta de manos del Santo Padre.
3. Los obispos. Ejercen una triple misión: enseñar, santificar y gobernar una porción de la Iglesia con un criterio propio, como cada uno de los sucesores de los Apóstoles. Ningún obispo, aunque haya sido nombrado cardenal, tiene autoridad sobre otro, sino que cada uno depende directamente del Papa.
En sus respectivas diócesis, son responsables de atender a sus presbíteros; cuidar de que cumplan debidamente las obligaciones propias de su estado, y de que dispongan de aquellos medios e instituciones que necesitan para el incremento de su vida espiritual e intelectual.
Ayudados por los presbíteros, sus colaboradores, y por los diáconos, los obispos tienen la misión de enseñar auténticamente la fe, de celebrar el culto, sobre todo la Eucaristía, y de dirigir su Iglesia como verdaderos pastores.
Para poder ser nombrado obispo se requiere que el interesado sea: linsigne por la firmeza de su fe, tenga buenas costumbres, buena fama y cuente con al menos treinta y cinco años. También tiene que llevar al menos cinco años de presbítero y ser doctor o al menos licenciado en Sagrada Escritura, teología o derecho canónico, o al menos verdaderamente experto en esas disciplinas.
4. Los párrocos. Es el pastor propio de la parroquia que se le confía, y ejerce el cuidado pastoral de la comunidad que le está encomendada bajo la autoridad del obispo diocesano. Entre sus tareas está la de conocer a los fieles que se le encomiendan. Para ello, visita las familias, a los enfermos, especialmente a los moribundos, fortaleciéndoles con la administración de los sacramentos. También está pendiente de los pobres y de aquellos que sufren especiales dificultades.
5. Los fieles laicos. Son los encargados de descubrir o de idear los medios para impregnar de vida cristianas las realidades sociales, políticas y económicas. Están llamados a ser testigos de Cristo en todas las cosas, también en el interior de la sociedad.
GRADOS DEL SACERDOCIO
No muchos saben que aunque el sacerdocio de Cristo es uno solo, existen en la Iglesia 3 grados dentro de este ministerio ¿Sabes cuáles son?
Uno de los grados de orden, es el de los diáconos. Seguramente los has visto pero quizás, no los has reconocido.
Son hombres que van al seminario y antes de ordenarse sacerdotes se ordenan diáconos de forma transitoria. Estos pueden bautizar, predicar y repartir la comunión, pero no pueden celebrar la misa, consagrar, ni confesar.
Hay también unos varones solteros o casados que son ordenados diáconos para quedarse así y ayudar a los sacerdotes: son los diáconos permanentes.
En otro orden, están los presbíteros, que pueden convertir el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo, pueden presidir misa y pueden perdonar los pecados. Todos los sacerdotes hacen promesas (no votos), o sea, que prometen: el celibato (esto significa que renuncian al matrimonio y a tener hijos). Además se comprometen a imitar las virtudes que vivió Cristo de oración, pobreza y obediencia.
Finalmente se encuentran los obispos. El Papa es quien los escoge y les encarga una zona o territorio específico de la Iglesia, una diócesis. El obispo vela por varios sacerdotes que a su vez cuidan de sus parroquias. Varias parroquias hacen una diócesis. Los obispos hacen las mismas cosas que cualquier sacerdote común y corriente y, además, son los que administran el Sacramento de la Confirmación y los únicos que pueden ordenar otros sacerdotes. Algo muy importante es saber que un obispo debe ser siempre fiel al Papa.
Oremos por nuestros diáconos, presbíteros y obispos para que puedan ofrecer con generosidad, fidelidad y entrega su servicio a la Iglesia.
Ahondando un poco…
Por la imposición de las manos, el cristiano puede ser llamado a servir en la Iglesia en tres grados u órdenes distintos: como obispo, como presbítero o como diácono. Los dos primeros participan del sacerdocio de Cristo cabeza mientras que el tercero está destinado a transparentar a Cristo siervo.
El episcopado
Los Apóstoles comunicaron a sus colaboradores el Don del Espíritu Santo para presidir las comunidades cristianas que nacían por la predicación de la palabra en todo el imperio romano. Así vemos cómo San Pablo mismo ordena a Timoteo y Tito: “al partir yo para Macedonia te rogué que permanecieras en Éfeso para que mandaras a algunos que no enseñaran doctrinas extrañas” (1 Tim. 1,3). “El motivo de haberte dejado en Creta, fue para que acabaras de organizar lo que faltaba y establecieras presbíteros en cada ciudad como yo te ordené” (Tit. 1,5).
Al saludar a los filipenses en su carta, menciona cómo desde los tiempos apostólicos, existen estos tres grados perfectamente establecidos: “Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, con los epíscopos y diáconos, gracia y paz de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo” (Fil. 1, 1).
El Concilio Vaticano II en su documento Lumen Gentium (la luz de las naciones) nos dice: “Entre los diversos ministerios que existen en la Iglesia, ocupa el primer lugar el ministerio de los obispos que, a través de una sucesión que se remonta al principio, son los transmisores de la semilla apostólica” (LG 20). Los obispos gozan “de la plenitud del Sacramento del Orden”. Es la cumbre del ministerio sagrado. El obispo está destinado para santificar, enseñar y gobernar a los fieles.
Por la Consagración Episcopal, el obispo queda constituido como miembro del colegio episcopal en comunión jerárquica con el Papa y con los demás obispos. Esta colegialidad del episcopado queda manifestado en el hecho de que para consagrar a un obispo normalmente se requiere la participación de varios obispos y la intervención especial del Papa, de quien recibe el nombramiento directamente.
El presbiterado
Ya desde el inicio, como hemos visto, los obispos se vieron en la necesidad de ayuda en diversos niveles y ordenaron presbíteros y diáconos. Los primeros están unidos al orden episcopal y participan de la autoridad y poderes con los cuales Cristo construye, santifica y gobierna a su Iglesia. Aunque no tienen la plenitud del sacerdocio, están unidos al obispo y quedan consagrados como verdaderos sacerdotes de la Nueva Alianza, a imagen de Cristo, Sumo y Eterno Sacerdote.
Ya sea en una parroquia, capellanía, movimiento apostólico, misiones, etc. el sacerdote es ordenado para “anunciar el Evangelio a los fieles, dirigirlos y para celebrar el culto divino”.
Las oraciones de la ordenación sacerdotal expresan bellisimamente el papel del futuro presbítero:
“De igual manera que diste a los Apóstoles de tu Hijo colaboradores subordinados, llenos de fe y sabiduría, para que los ayudases a predicar el Evangelio por todo el mundo, te pedimos Señor, que nos concedas también a nosotros esta misma ayuda que necesita tanto nuestra fragilidad”.
Por su parte, el Prefacio de la Misa, entre otros conceptos ora del siguiente modo:
“Porque Cristo no sólo comunica la dignidad del sacerdocio a todo el pueblo redimido, sino que con especial predilección y mediante la imposición de las manos, elige a algunos de entre los hermanos y los hace partícipes de su ministerio de salvación, a fin de que renueven, en su nombre, el sacrificio redentor, preparen a tus hijos el banquete pascual, fomenten la caridad en tu pueblo santo, lo alimenten con la palabra, lo fortifiquen con los Sacramentos y consagrando su vida a Ti y a la salvación de sus hermanos, se esfuercen por reproducir en sí la imagen de Cristo y te den un constante testimonio de fidelidad y amor”.
El diaconado
Leemos en los Hechos de los Apóstoles cómo al crecer la comunidad cristiana, los Apóstoles se vieron incapaces de atender adecuadamente sobre todo a las viudas y entonces “convocaron a la asamblea de los discípulos y dijeron: No parece bien que nosotros abandonemos la palabra de Dios para servir las mesas. Por lo tanto, hermanos, buscad entre vosotros a siete hombres de buena fama, llenos del Espíritu y de sabiduría y los pondremos al frente de este cargo… y habiendo hecho oración, les impusieron las manos” (Hech. 6, 2-6), constituyéndolos “diáconos” o sea, servidores.
El obispo les impone las manos significando así que el diácono está especialmente vinculado al obispo en las tareas de la diaconía. Les corresponde, entre otras cosas, asistir al obispo en la celebración de los sagrados misterios, sobre todo en la Eucaristía y en la distribución de la misma. Pueden asistir al matrimonio y bendecirlo, proclamar el Evangelio y predicar, presidir exequias, bautizar, etc.
Desde el Concilio Vaticano II la Iglesia ha restablecido el diaconado como ministerio permanente, entre varones solteros o casados, lo que viene a ser una grandísima ayuda a los presbíteros, que como los apóstoles, están normalmente abrumados de trabajo.
El diaconado, el presbiterado y el episcopado son grados sacramentales del Orden. No son tres sacramentos distintos, sino que los tres constituyen un único sacramento, el del Orden sacerdotal.
3º DE ESO
EL SICARIO DE DIOS
1. Portada
Cada alumno realizará una portada para su trabajo haciendo un dibujo relacionado con la película.
2. La Iglesia
-Modelos históricos de relación entre el estado y la religión
- Estado ateo o ateísmo político. Es la promoción estatal del ateísmo, no admite ninguna forma de religión, iglesia o culto. La URSS fue el primer ejemplo de Estado ateo; la doctrina fue introducida en 1917 por el ideólogo de la revolución, Vladimir Lenin. Se establece a través de la destrucción de edificios religiosos (Iglesias, Mezquitas, etc..), la quema de libros sagrados (Biblia, Corán y Toráh), la persecución o el asesinato de ministros religiosos y la prohibición total de la práctica religiosa.
- Estado laico o religiosamente neutral. El Estado admite todas las religiones pero no apoya ni financia a ninguna. Hay varios modelos, entre ellos la laïcité francesa o la Wall of Separation de EE.UU.
- Estado aconfesional o neutro colaborativo. El Estado no tiene una iglesia oficial o religión de Estado, pero si le da importancia a las expresiones religiosas de su pueblo, y por lo tanto no sólo las protege, sino que las fomenta, de forma equitativa entre los diferentes sectores religiosos presentes en su territorio. Éste es un modelo reivindicado por los diferentes sectores religiosos que no tienen estatus de religión oficial.
- Estado multirreligioso o con varias religiones oficiales: El Estado ayuda y llega hasta a financiar a varias religiones que reconoce estatales, mantiene a sus clérigos, sus templos y sus actividades. Aunque se den casos de tolerancia religiosa, los beneficios para las religiones oficiales resultan en detrimento de las demás religiones presentes en el territorio.
- Estado confesional o con religión oficial. Una iglesia o religión ocupa el lugar junto al Estado en tareas de gobierno y orden público, el Estado mantiene la Iglesia dominante a través de los impuestos de la población. Aunque se den casos en que también se toleran otras iglesias, los derechos de la religión Estatal menoscaban a los demás sectores religiosos que hacen presencia entre su población.
- Teocracia o unificado con la religión oficial. Una religión dominante es la que ocupa el poder en el gobierno, por lo general, se establece como la única religión tolerada y todas las demás son suprimidas, se aplican las leyes que conciernen a esa religión. Se mantiene en la Ciudad del Vaticano (también en el Monte Athos y la Orden de Malta en Europa) y en gran parte de oriente próximo, como en Arabia Saudí; se instauró en el poder en Irán a partir de 1979, en Marruecos el rey es a la vez líder político y religioso, y en Pakistán se aplica la sharia especialmente en zonas rurales. Afganistán en los 90 (Estado Islámico y régimen talibán) la aplicó, también se ha aplicado la sharia, aunque a nivel regional, en algunas zonas mayormente musulmanas de Nigeria y Sudán. Aunque existen algunos países islámicos seculares como Turquía e Indonesia, pero en general el islam tiene una fuerte influencia política en la mayoría de países islámicos.
– Primera palabra que se te ocurra sobre la Iglesia
– Diferencias entre la Iglesia en la película y en la realidad
– Cuestiones importantes sobre la Iglesia
3º DE ESO
EL SICARIO DE DIOS
1. Portada
Cada alumno realizará una portada para su trabajo haciendo un dibujo relacionado con la película.
2. La Iglesia
-Modelos históricos de relación entre el estado y la religión
- Estado ateo o ateísmo político. Es la promoción estatal del ateísmo, no admite ninguna forma de religión, iglesia o culto. La URSS fue el primer ejemplo de Estado ateo; la doctrina fue introducida en 1917 por el ideólogo de la revolución, Vladimir Lenin. Se establece a través de la destrucción de edificios religiosos (Iglesias, Mezquitas, etc..), la quema de libros sagrados (Biblia, Corán y Toráh), la persecución o el asesinato de ministros religiosos y la prohibición total de la práctica religiosa.
- Estado laico o religiosamente neutral. El Estado admite todas las religiones pero no apoya ni financia a ninguna. Hay varios modelos, entre ellos la laïcité francesa o la Wall of Separation de EE.UU.
- Estado aconfesional o neutro colaborativo. El Estado no tiene una iglesia oficial o religión de Estado, pero si le da importancia a las expresiones religiosas de su pueblo, y por lo tanto no sólo las protege, sino que las fomenta, de forma equitativa entre los diferentes sectores religiosos presentes en su territorio. Éste es un modelo reivindicado por los diferentes sectores religiosos que no tienen estatus de religión oficial.
- Estado multirreligioso o con varias religiones oficiales: El Estado ayuda y llega hasta a financiar a varias religiones que reconoce estatales, mantiene a sus clérigos, sus templos y sus actividades. Aunque se den casos de tolerancia religiosa, los beneficios para las religiones oficiales resultan en detrimento de las demás religiones presentes en el territorio.
- Estado confesional o con religión oficial. Una iglesia o religión ocupa el lugar junto al Estado en tareas de gobierno y orden público, el Estado mantiene la Iglesia dominante a través de los impuestos de la población. Aunque se den casos en que también se toleran otras iglesias, los derechos de la religión Estatal menoscaban a los demás sectores religiosos que hacen presencia entre su población.
- Teocracia o unificado con la religión oficial. Una religión dominante es la que ocupa el poder en el gobierno, por lo general, se establece como la única religión tolerada y todas las demás son suprimidas, se aplican las leyes que conciernen a esa religión. Se mantiene en la Ciudad del Vaticano (también en el Monte Athos y la Orden de Malta en Europa) y en gran parte de oriente próximo, como en Arabia Saudí; se instauró en el poder en Irán a partir de 1979, en Marruecos el rey es a la vez líder político y religioso, y en Pakistán se aplica la sharia especialmente en zonas rurales. Afganistán en los 90 (Estado Islámico y régimen talibán) la aplicó, también se ha aplicado la sharia, aunque a nivel regional, en algunas zonas mayormente musulmanas de Nigeria y Sudán. Aunque existen algunos países islámicos seculares como Turquía e Indonesia, pero en general el islam tiene una fuerte influencia política en la mayoría de países islámicos.
– Primera palabra que se te ocurra sobre la Iglesia
– Diferencias entre la Iglesia en la película y en la realidad
– Cuestiones importantes sobre la Iglesia
3º DE ESO
EL SICARIO DE DIOS
En un mundo asolado por siglos de guerra entre el hombre y los vampiros, un legendario guerrero (Bettany) que destacó durante la última Guerra del Vampiro, se ha convertido en un sacerdote que vive en comunidad en las amuralladas ciudades controladas por la Iglesia. Sin embargo, cuando su joven sobrina es secuestrada por un grupo de vampiros que viven en los páramos, el sacerdote rompe sus sagrados votos y emprende su búsqueda decidido a vengarse de ellos, especialmente de su brutal líder (Karl Urban). En esta aventura lo acompaña el novio de la chica (Gigandet), un sheriff y una sacerdotisa (Maggie Q) que pertenece a la legión de asesinos de vampiros y posee habilidades de combate sobrenaturales.
3º DE ESO
EL SICARIO DE DIOS
En un mundo asolado por siglos de guerra entre el hombre y los vampiros, un legendario guerrero (Bettany) que destacó durante la última Guerra del Vampiro, se ha convertido en un sacerdote que vive en comunidad en las amuralladas ciudades controladas por la Iglesia. Sin embargo, cuando su joven sobrina es secuestrada por un grupo de vampiros que viven en los páramos, el sacerdote rompe sus sagrados votos y emprende su búsqueda decidido a vengarse de ellos, especialmente de su brutal líder (Karl Urban). En esta aventura lo acompaña el novio de la chica (Gigandet), un sheriff y una sacerdotisa (Maggie Q) que pertenece a la legión de asesinos de vampiros y posee habilidades de combate sobrenaturales.
3º DE ESO
Comenzamos un nuevo año juntos, y ya van TRES!!! Este se presenta con un poco de incertidumbre, dudas, preguntas… Será, sin duda, un curso un poco diferente, en el que tendremos que adaptar nuestra metodología y nuestras actividades a la nueva situación, que supone un reto tanto para el profesor como para los alumnos, pero seguro que entre todos conseguiremos afrontarlo.
1. LA ASIGNATURA. RECORDAMOS EL FUNCIONAMIENTO. NOVEDADES.
En este curso tan diferente que se nos presenta será necesario adaptar nuestras clases a la nueva situación. Vamos a explicar ahora brevemente cómo van a ser las clases y cómo se va a evaluar.
A) Desarrollo de las clases:
Las actividades que vamos a realizar en clase de Religión son básicamente dos:
Películas. Comenzaremos cada trimestre con una película, sobre la que trabajaremos posteriormente. La temática de las películas no tiene que ser específicamente religiosa (algunas sí), puesto que ser creyente es una forma de vivir y de situarse ante el mundo, por lo que cualquier tema importante para la vida es importante para el creyente. Se trata de aprender a enfrentarse a diferentes situaciones desde el punto de vista de un creyente. El cine es una muy buena herramienta para descubrir nuevos puntos de vista, para aprender lecciones importantes y para desarrollar nuestra empatía. Las películas que veremos nos ayudarán a plantearnos preguntas importantes sobre Dios, sobre nosotros mismos y sobre la vida.
En la sección “Películas 3º de ESO” de esta página, aparecen las películas que vamos a trabajar durante el curso, sección que se irá completando poco a poco (se aceptan sugerencias).
Una vez vista la película, la trabajaremos de diferentes formas, fundamentalmente a través de una ficha de trabajo y a través del diálogo y los comentarios sobre diferentes escénas de la película.
Powerpoint. Otra actividad importante será la realización de un trabajo en Powerpoint. Habitualmente se realiza por parejas y se hace en horas de clase, pero dadas las circunstancias habrá que hacerlo en casa. Se puede plantear de manera individual o por parejas, haciéndose en todo caso el reparto del trabajo de forma telemática. Los temas serán los correspondientes al temario de Religión de 3º de ESO. Una vez realizados, habrá que exponerlos en clase y el profesor explicará cada tema según se va exponiendo. Para realizar el trabajo, nos ayudaremos de los apuntes que hay en la sección “Apuntes 3º de ESO” de esta página, y de diferentes recursos que podemos encontrar en internet.
Actividades complementarias. Además de estas dos actividades básicas, sobre las que recae el mayor peso de la nota, realizaremos algunas otras adaptadas a la nueva situación. Por poner algún ejemplo, cada día comenzaremos la clase con un cuento o con una canción. Entre todos comentaremos el significado del cuento o de la letra de la canción. También realizaremos algún juego, siempre adaptado a las nuevas circunstancias.
2. EL TEMARIO.
La relación de temas que trataremos durante este curso es la siguiente:
1. La naturaleza humana desea el infinito
2. La búsqueda de sentido en la experiencia de la enfermedad, la muerte, el dolor, etc.
3. La ruptura del hombre con Dios por el pecado
4. El relato bíblico del pecado original
5. La persona transformada por el encuentro con Jesús
6. La Iglesia, lugar de encuentro con Cristo
7. Experiencia de plenitud en el encuentro con Cristo
8. La experiencia de fe genera una cultura
Los diferentes temas se abordarán a través de las actividades propuestas anteriormente, acercándose a ellos y profundizando a través de las películas vistas, los trabajos en Powerpoint y las actividades complementarias.
3. EVALUACIÓN
La nota de la asignatura de religión dependerá fundamentalmente de dos cosas:
1. Actitud en clase y comportamiento. el 50% de la nota depende de la actitud en clase y del comportamiento. No se realizarán exámenes ni orales ni escritos, por lo que es fundamental el desarrollo de las clases y el trabajo realizado en las mismas para la evaluación. Una buena actitud en clase implica realizar las tareas que se encomiendan en cada momento y comportarse de manera adecuada.
2. Actividades realizadas. El otro 50% de la nota de la asignatura, procederá de la corrección de los diferentes trabajos realizados en clase o en casa a lo largo de cada trimestre.
4. PRIMERA ACTIVIDAD: «Es increblible!!!»
A lo largo de estos años, hemos ido tratando muchos temas en nuestra clase de Religión. A través de las diferentes actividades que hemos ido haciendo, especialmente las películas, hemos ido reflexionando sobre diferentes situaciones a las que podemos enfrentarnos como personas y como humanidad. En ocasiones, nos hemos imaginado situaciones difíciles, películas como 2012 o Los juegos del hambre, nos han presentado a la humanidad en serias dificultades, o en mundos distópicos. Hasta ahora, nuestra vida ha sido, en general, relativamente tranquila y relativamente normal. Hasta que llega la pandemia y pone todo del revés.
Desde que empezó el estado de alarma, han circulado por diferentes redes muchos vídeos, memes, fotos, relativos a la situación que estamos viviendo. De entre estos vídeos, hay uno que me ha llamado especialmente la atención, por la gracia que tiene y por que el análisis que hace el protagonista del vídeo de lo que está pasando es demoledor, claro y conciso, y seguro que muchos de nosotros coincidiremos con su análisis.
Hoy, me gustaría que empezaramos el curso con el análisis de la situación real que estamos viviendo, porque, en esta ocasión no se trata de ficción, ni de una película.
¿Cómo habéis vivido y como estáis viviendo lo que nos toca estos días?
Periodos: PRIMERAS NOTICIAS SOBRE EL CORONAVIRUS. EL CORONAVIRUS EN ITALIA. EL CORONAVIRUS LLEGA A ESPAÑA. EL ESTADO DE ALARMA Y EL CONFINAMIENTO. LA DESESCALADA. EL VERANO. VUELTA AL COLE.
5. CREACIÓN DE EQUIPOS TEAMS
Dadas las circunstancias que estamos viviendo, cabría la posibilidad de que alguno de nosotros, o todos, tuvieramos que trabajar desde casa en algún momento, por lo que es bueno tener previsto cómo hacerlo. La herramienta que usaremos para ello será TEAMS. En los primeros días de clase formaremos los equipos y explicaremos la forma de trabajar. Esta página, RELI S. XXI, será integrada en cada uno de los equipos y se podrá nevegar por ella desde TEAMS. En esta página el profesor colgará el diario de cada clase para que los alumnos que estén en casa puedan seguir la clase sin problemas.
3º DE ESO
Comenzamos un nuevo año juntos, y ya van TRES!!! Este se presenta con un poco de incertidumbre, dudas, preguntas… Será, sin duda, un curso un poco diferente, en el que tendremos que adaptar nuestra metodología y nuestras actividades a la nueva situación, que supone un reto tanto para el profesor como para los alumnos, pero seguro que entre todos conseguiremos afrontarlo.
1. LA ASIGNATURA. RECORDAMOS EL FUNCIONAMIENTO. NOVEDADES.
En este curso tan diferente que se nos presenta será necesario adaptar nuestras clases a la nueva situación. Vamos a explicar ahora brevemente cómo van a ser las clases y cómo se va a evaluar.
A) Desarrollo de las clases:
Las actividades que vamos a realizar en clase de Religión son básicamente dos:
Películas. Comenzaremos cada trimestre con una película, sobre la que trabajaremos posteriormente. La temática de las películas no tiene que ser específicamente religiosa (algunas sí), puesto que ser creyente es una forma de vivir y de situarse ante el mundo, por lo que cualquier tema importante para la vida es importante para el creyente. Se trata de aprender a enfrentarse a diferentes situaciones desde el punto de vista de un creyente. El cine es una muy buena herramienta para descubrir nuevos puntos de vista, para aprender lecciones importantes y para desarrollar nuestra empatía. Las películas que veremos nos ayudarán a plantearnos preguntas importantes sobre Dios, sobre nosotros mismos y sobre la vida.
En la sección “Películas 3º de ESO” de esta página, aparecen las películas que vamos a trabajar durante el curso, sección que se irá completando poco a poco (se aceptan sugerencias).
Una vez vista la película, la trabajaremos de diferentes formas, fundamentalmente a través de una ficha de trabajo y a través del diálogo y los comentarios sobre diferentes escénas de la película.
Powerpoint. Otra actividad importante será la realización de un trabajo en Powerpoint. Habitualmente se realiza por parejas y se hace en horas de clase, pero dadas las circunstancias habrá que hacerlo en casa. Se puede plantear de manera individual o por parejas, haciéndose en todo caso el reparto del trabajo de forma telemática. Los temas serán los correspondientes al temario de Religión de 3º de ESO. Una vez realizados, habrá que exponerlos en clase y el profesor explicará cada tema según se va exponiendo. Para realizar el trabajo, nos ayudaremos de los apuntes que hay en la sección “Apuntes 3º de ESO” de esta página, y de diferentes recursos que podemos encontrar en internet.
Actividades complementarias. Además de estas dos actividades básicas, sobre las que recae el mayor peso de la nota, realizaremos algunas otras adaptadas a la nueva situación. Por poner algún ejemplo, cada día comenzaremos la clase con un cuento o con una canción. Entre todos comentaremos el significado del cuento o de la letra de la canción. También realizaremos algún juego, siempre adaptado a las nuevas circunstancias.
2. EL TEMARIO.
La relación de temas que trataremos durante este curso es la siguiente:
1. La naturaleza humana desea el infinito
2. La búsqueda de sentido en la experiencia de la enfermedad, la muerte, el dolor, etc.
3. La ruptura del hombre con Dios por el pecado
4. El relato bíblico del pecado original
5. La persona transformada por el encuentro con Jesús
6. La Iglesia, lugar de encuentro con Cristo
7. Experiencia de plenitud en el encuentro con Cristo
8. La experiencia de fe genera una cultura
Los diferentes temas se abordarán a través de las actividades propuestas anteriormente, acercándose a ellos y profundizando a través de las películas vistas, los trabajos en Powerpoint y las actividades complementarias.
3. EVALUACIÓN
La nota de la asignatura de religión dependerá fundamentalmente de dos cosas:
1. Actitud en clase y comportamiento. el 50% de la nota depende de la actitud en clase y del comportamiento. No se realizarán exámenes ni orales ni escritos, por lo que es fundamental el desarrollo de las clases y el trabajo realizado en las mismas para la evaluación. Una buena actitud en clase implica realizar las tareas que se encomiendan en cada momento y comportarse de manera adecuada.
2. Actividades realizadas. El otro 50% de la nota de la asignatura, procederá de la corrección de los diferentes trabajos realizados en clase o en casa a lo largo de cada trimestre.
4. PRIMERA ACTIVIDAD: «Es increblible!!!»
A lo largo de estos años, hemos ido tratando muchos temas en nuestra clase de Religión. A través de las diferentes actividades que hemos ido haciendo, especialmente las películas, hemos ido reflexionando sobre diferentes situaciones a las que podemos enfrentarnos como personas y como humanidad. En ocasiones, nos hemos imaginado situaciones difíciles, películas como 2012 o Los juegos del hambre, nos han presentado a la humanidad en serias dificultades, o en mundos distópicos. Hasta ahora, nuestra vida ha sido, en general, relativamente tranquila y relativamente normal. Hasta que llega la pandemia y pone todo del revés.
Desde que empezó el estado de alarma, han circulado por diferentes redes muchos vídeos, memes, fotos, relativos a la situación que estamos viviendo. De entre estos vídeos, hay uno que me ha llamado especialmente la atención, por la gracia que tiene y por que el análisis que hace el protagonista del vídeo de lo que está pasando es demoledor, claro y conciso, y seguro que muchos de nosotros coincidiremos con su análisis.
Hoy, me gustaría que empezaramos el curso con el análisis de la situación real que estamos viviendo, porque, en esta ocasión no se trata de ficción, ni de una película.
¿Cómo habéis vivido y como estáis viviendo lo que nos toca estos días?
Periodos: PRIMERAS NOTICIAS SOBRE EL CORONAVIRUS. EL CORONAVIRUS EN ITALIA. EL CORONAVIRUS LLEGA A ESPAÑA. EL ESTADO DE ALARMA Y EL CONFINAMIENTO. LA DESESCALADA. EL VERANO. VUELTA AL COLE.
5. CREACIÓN DE EQUIPOS TEAMS
Dadas las circunstancias que estamos viviendo, cabría la posibilidad de que alguno de nosotros, o todos, tuvieramos que trabajar desde casa en algún momento, por lo que es bueno tener previsto cómo hacerlo. La herramienta que usaremos para ello será TEAMS. En los primeros días de clase formaremos los equipos y explicaremos la forma de trabajar. Esta página, RELI S. XXI, será integrada en cada uno de los equipos y se podrá nevegar por ella desde TEAMS. En esta página el profesor colgará el diario de cada clase para que los alumnos que estén en casa puedan seguir la clase sin problemas.